21 de desembre del 2014

urbanismo precario

"No lo llaméis urbanismo emergente, llamadlo urbanismo precario"
Ramon Marrades, La ciutat construïda, El Diario de la Comunitat Valenciana
12 diciembre 2014

Urbanismo precario / Ramon Marrades

Las razones son múltiples: la eterna crisis, la esclerosis del planeamiento urbano, la reconfiguración del mercado de trabajo, la reacción democrática de la ciudadanía ante unas instituciones disfuncionales. Las ciudades vuelven a ser lo que siempre han sido, el epicentro de las transformaciones políticas y las innovaciones sociales.

Con un fuerte componente generacional, protagonizadas, entre otros, por aquellos ya-no-tan-jóvenes excluidos de los sistemas de toma de decisiones, aparecen iniciativas urbanas que buscan llenar huecos que la administración deja vacíos y mejorar las ciudades con el derecho percibido de hacerlo. Urbanismo tácticourbanismo punk, urbanismo emergente o urbanismo participativo. Muchas de esas prácticas recuperan el carácter multidisciplinar del urbanismo, olvidado prácticamente desde los años ochenta. Devuelven un rol central al ciudadano, como usuario de la ciudad, para quien la capacidad técnica debe ser un servicio. No es mi intención infravalorar esos procesos, los que escribimos en este blog y los integrantes de nuestras redes de trabajo somos parte activa de ellos, pero me parece importante hacer tres matizaciones.

En primer lugar, no estamos inventando nada nuevo. En los cincuenta y sesenta, el ensayo ‘Non-plan’ de Peter Hall et al. (1969), las lúcidas interpretaciones sobre el funcionamiento de las ciudades de Jane Jacobs (1961), la reflexión sobre la importancia de los espacios y la esfera pública de Hannah Arendt (1958) y Jurgen Habermas (1962), el advocacy planning de Paul Davidoff (1965) que bien explican Marc Martí y Albert Arias en la Trama Urbana y un etcétera infinito de pensamiento, han coincidido en detectar la importancia del espacio compartido, la relevancia política de la ciudad y la centralidad de sus habitantes. Todo ello unido al diagnóstico de que la planificación urbana ha ido produciendo, con el paso de los años, entornos menos habitables a medida que se iban incrementando los conocimientos técnicos. Por eso es urgente volver a los maestros y cuestionarlos, explicar y entender por qué cuando los diagnósticos están sobre la mesa, las administraciones y los técnicos siguen (seguimos) cometiendo los mismos errores década tras década.

En segundo lugar, si queremos transformar las ciudades en profundidad no podemos seguir refugiándonos en conceptos nicho y actitudes puristas, en apuestas altermundistas que no definen cuál es la alternativa. Estamos cansados de oír anunciar el cambio de paradigma cuando no se sabe muy bien que hay después. Me parece urgente abandonar la vocación underground y expresarnos con terminologías y diagnósticos accesibles. ¿No es el ciudadano el principal protagonista del urbanismo?

En tercer lugar, no podemos esperar que mejoras urbanas tácticas y transitorias solucionen los problemas importantes de nuestras ciudades. Al final, le estamos haciendo el juego a un estado sumergido que abre grietas donde entretenernos; dejando las habitaciones oscuras y los pasillos libres, otra vez y como siempre, para negocios más lucrativos, para que funcionen como vasos comunicantes entre poderes. Podemos distraernos activando solares con cuatro duros, mientras se redefine, a expensas de nuestras iniciativas espontáneas, la estructura productiva de nuestras ciudades. No es urbanismo táctico, es urbanismo precario; una solución efímera, un parche. Un parche del que podemos aprender mucho, sin duda con un valor transformador inmenso, pero un parche al fin y al cabo. Un divertimento mientras se toman las decisiones importantes a nuestras espaldas.

No nos queda otra que subir de escala, recuperar la política, no sólo para que ese nuevo urbanismo punk, emergente, participativo y transformador sea una actividad de futuro, también para no cometer los errores del pasado, para hacer factible aquello que llevamos medio siglo predicando.
Ramon Marrades es economista urbano y emprendedor social. Es investigador en Econcult, la Unidad de Investigacion en Economía de la Cultura de la Universidad de Valencia, y miembro fundador de la plataforma internacional de jóvenes urbanistas Urbego. Su trabajo, que le ha llevado a una decena de países, se encuentra en la intersección entre la economía y la planificación urbana en forma de investigación, formación, emprendimiento y consultoría.

14 de desembre del 2014

rehabitar el viaducto de Girona (II)

propuesta para reintegrar la infraestructura a la ciudad
Chiara Signoroni y Manuela Scotti, Tesi di Laurea (proyecto final de carrera)
Politecnico di Milano, POLIMI
13 diciembre 2014, vía Plataforma Arquitectura
Despiece. Chiara Signoroni y Manuela Scotti

La discusión sobre el futuro de los espacios urbanos situados bajo el viaducto del tren en la ciudad de Girona se planteó ya en un workshop organizado por la Universitat de Girona con el título Rehabitar el Viaducto, durante el mes de septiembre de 2011. Este debate produjo resultados muy sugerentes gracias al trabajo desarrollado por algunos miembros del Grupo de Investigación Habitar y Sílvia Musquera, como coordinadores de uno de los equipos, juntamente con los profesores júnior Arnau Arboix, Adrià Bofarull y Neus Rico. 

Aquella experiencia produjo un renovado interés por este episodio urbano, hasta el punto que ahora vuelve, sobre las bases planteadas en aquel workshop, de la mano de dos arquitectas italianas como proyecto final de carrera, publicado en Plataforma Arquitectura, tal como se describe a continuación.

................................................................................................................

"Si le tomamos el pulso a las principales discusiones sobre ciudad e infraestructura, los supuestos idealizados de progreso y desarrollo que arribaron, por ejemplo, junto a la llegada del tren, ahora son matizadas por una visión que reconoce y asume las consecuencias de la infraestructura de transporte en la transformación de las ciudades en los últimos años.

En el caso de Girona, a grandes rasgos la línea férrea ha moldeado su morfología urbana y ha marcado una desconexión perceptual con su contexto inmediato, tal como advierten las ahora arquitectas Chiara Signoroni y Manuela Scotti, en su proyecto final de carrera (Politécnico de Milán) sobre el viaducto de Girona, ya presentado públicamente al Ayuntamiento de Girona y a la sede del Colegio de Arquitectos de Catalunya.

"Invertir la relación entre infraestructura y sus alrededores es remendar el tejido urbano a través de un diálogo entre espacio público, contexto y ciudadanía", señalan las autoras.

Emplazamiento. Chiara Signoroni y Manuela Scotti

Según las autoras: ciudad e infraestructura tienen desde siempre una relación de amor y odio. Con el ferrocarril en el siglo XIX se abre un tema complejo, debido a las diferencias entre lógica ferroviaria y planificación de la ciudad. En el siglo XIX, el tren -inicialmente considerado un símbolo de desarrollo- circunscribe el crecimiento urbano porque los espacios que rodean a la ciudad son lugares de tensiones sociales y territoriales. Mientras en el siglo XX, el Tren de Alta Velocidad (AVE) encarna la imagen de progreso, representando una oportunidad para el desarrollo de la ciudad.

Utilización del espacio. Chiara Signoroni y Manuela Scotti
En Girona, la línea del ferrocarril ha dado forma a la morfología urbana, y su huella sigue siendo legible. La ciudad ve la llegada del tren cómo la posibilidad de destacarse en una perspectiva más amplia. A 100 km de Barcelona, 60 km de la frontera francesa y 40 km de la Costa Brava, su posición nodal hace que sea importante centro de comercio en el territorio. Los eventos que afectan el tren han dejado una gran infraestructura a Girona: el viaducto del ferrocarril, que cruza la ciudad y la divide segundo el eje norte-sur. Con la llegada del AVE se considera la posibilidad de derribar la infraestructura y devolver a la ciudad su espacio público con la creación de un pasillo subterráneo para AVE y tren convencional.
Planta detalle. Chiara Signoroni y Manuela Scotti

En el debate sobre el futuro de la infraestructura (que con la crisis actual no puede ser desmantelada), pocas propuestas miran debajo del viaducto. Los políticos lo ven como un elemento que hace daño al espacio público. La condición “de bajo”, denota sus márgenes y justifica su deterioro. Por otro lado, a ciudadanía vive estos espacios como una barrera psicológica, no a causa del viaducto mismo, sino del uso anacrónico que se hace.
Espacio de arte. Chiara Signoroni y Manuela Scotti

Invertir la relación entre infraestructura y sus alrededores podría ser la manera de salir de estos debates y reapropiarse de los espacios públicos. Es remendar el tejido urbano a través de un diálogo entre espacio público, contexto y ciudadanía, planeando un lugar agradable, versátil, funcional y de integración.
Espacio comercial. Chiara Signoroni y Manuela Scotti

El problema de diseño es muy complejo porque cada detalle -en particular dentro de un espacio público- modifica la percepción del espacio. La calidad arquitectónica se convierte en un catalizador de la atención y lleva a revivir las zonas urbanas a veces olvidadas o degradadas.

Detalles. Chiara Signoroni y Manuela Scotti

El proyecto se constituye de dos niveles de intervención, igualmente importantes, que sólo juntos realmente pueden reurbanizar la zona en cuestión: el primer nivel es el conjunto de diseño arquitectónico a través del cual se han rediseñado los espacios, las carreteras, los materiales y la utilización que las personas hacen o que podrían hacer de estos espacios.

Acciones. Chiara Signoroni y Manuela Scotti

Mientras tanto, el segundo nivel es el elemento artístico que se inserta en estos lugares con un programa de eventos artísticos y culturales que afectan a la ciudadanía -tanto una empresa creativa como explotadora- de manera que la unión de las dos líneas de acción reclamará a la ciudad su espacio."
Espacio de juegos. Chiara Signoroni y Manuela Scotti

(ver también Rehabitar el Viaducto)

7 de desembre del 2014

l'incompiuto siciliano

L'incompiuto siciliano és una iniciativa que vol posar en valor les construccions inacabades que es troben a tota Itàlia, amb una especial intensitat a Sicília. La plataforma web es planteja com un observatori participatiu sobre el fenomen de les obres inconcluses a Itàlia. Els seguidors poden introduir i localitzar sobre la base de Google Maps les obres que coneguin. Falta una certa informació sobre algunes d'aquestes obres, però la imatge general és extraordinària. Com ells asseguren, són les veritables ruïnes modernes, un paradigma de l'arquitectura i l'obra civil italiana després de la segona guerra mundial.

Bambinopoli, parc "Chico Mendes" a Giarre (Catània), la capital siciliana de les obres inacabades

Aquí podeu llegir una traducció de la introducció al projecte, il·lustrada amb algunes de les imatges que formen el corpus de la plataforma web. A continuació, un resum del Manifest de l'Inacabat en el que posen les bases per a un canvi d'actitud respecte aquestes ruïnes modernes. No és gens fàcil trobar respostes a un panorama tan extens i divers d'obres a mig fer i abandonades des de fa temps (les més antigues, des dels anys 1950) a tot el país. Els autors propugnen acceptar-les com a part d'una nova manera d'entendre el paisatge. En qualsevol cas, ens hauria de fer pensar a nosaltres, que vivim en un altre país on, probablement, ens trobarem en una situació similar en poc temps.

"Una recerca sobre l'arquitectura inacabada ha de tractar la qüestió de les obres públiques inconcluses a Itàlia, indagant de manera interdisciplinària les relacions entre aquests edificis i el seu context, afirmant-ne el valor artístic i proposant una nova definició estilísitca. Veiem tot el "sistema nacional d'obres inacabades" catalogat durant prop de dos anys de recerca com a testimoni del context sociocultural actual que impregna la nostra vida diària i proposem la definició d'un estil que restitueixi la pluralitat de punts de vista.

Amb això volem demostrar que l'incompiuto siciliano no és només una etiqueta que defineixi de manera forçada un paquet heterogeni d'obres, sinó més aviat un model teòric veritable, capaç de reconèixer, identificar i, en certa mesura, predir la configuració una obra o d'un sistema d'obres inacabades existents o en procés de convertir-s'hi.

Estructura de la fàbrica de ciment de Sapri (Campània), iniciada el 1950 amb fons del pla Marshall
Monumento ai Mille a Marsala (Trapani), projectat el 1960, iniciat el 1986 i abandonat fins que el 2003 l'Ajuntament decideix acabar-lo sense que fins ara hagi canviat la situació

Les obres inacabades se'ns apareixen com a llocs de memòria col·lectiva encara per investigar, nascudes com ruïnes produïdes per un temps determinat; arquitectures que conformen el paisatge. La definició d'un estil arquitectònic propi permet identificar un model teòric de referència que permeti interpretar un fenomen present a tot el territori nacional i, en particular, al de Sicília, comú durant els anys 1970-80, però que és possible rastrejar des dels anys 50 fins ara; una eina per a interpretar la història recent italiana.

Centre Polifuncional a Giarre (Catània), iniciat el 1987 i proposat com a part del Parc Arqueològic de l'Inacabat
Teatre Consagra a Gibellina (Trapani), iniciat com a part de la reconstrucció de la ciutat després del terratrèmol de 1968

El projecte surt de l'idea de treballar primer en la percepció del fenomen en els mitjans de comunicació amb el propòsit de desenvolupar, a continuació, una intervenció directa en el territori. Atribuir a "l'inacabat" un significat artístic i arquitectònic implica una altra forma de llegir aquests llocs, útil per a una comprensió més àmplia i discutida de les relacions entre el territori i els que l'habiten.

Dic de Blufi (Palermo), iniciat el 1990 per abastir d'aigua una part de la Sicília central, sense avaluació prèvia de l'impacte ambiental 
Hospital a Agnone (Molise)

Les obres públiques inacabades són un patrimoni artístic-cultural i com a tal poden convertir-se en potencials promotors d'una economia local com succeeix en altres llocs històrics. Una resposta concreta a la sensació d'impotència que aquests llocs produeixen. El projecte d'un autèntic parc arqueològic, en col·laboració amb l'Ajuntament de Giarre [capital siciliana de les obres inacabades], vol ser el resultat concret d'una operació de construir un relat històric que revaloritzi el territori. L'impuls creatiu, el desig d'auto-celebració i la densitat cultural que han donat a conèixer al món Sicília i Itàlia, poden emergir en el projecte del Parc Arqueològic de l'Inacabat; una intervenció de desenvolupament sostenible del territori orientat a la promoció turística, reconeixent les obres inacabades com a recursos".

Camp de polo de Giarre (Catània), un dels pocs a Itàlia, amb tribunes per a 22.000 en una població de 20.000 habitants
Viaducte de Rivolo, Campo Basso (Molise)

Manifest de l'inacabat

1. L'incompiuto siciliano és el paradigma interpretatiu de l'arquitectura pública a Itàlia des de després de la guerra fins ara.
2. Les obres inacabades són ruïnes de la supermodernitat, monuments generats per l'entusiasme creatiu del liberalisme.
3. L'incompiuto siciliano s'insereix en el paisatge de manera incisiva i radical. El procés de creació de les obres públiques inconcluses celebra la conquesta del paisatge per l'home modern.
4. El postulat de l'incompiuto és l'execució parcial del projecte i es caracteritza pels canvis continus en el temps poden generar un nou impuls endavant.
5. La natura, per mitjà de la vegetació natural, dialoga sinestèticament amb les obres inacabades, reapropiant-se dels llocs i redefinint el paisatge.
6. Les obres inacabades tenen en el formigó armat seu material de construcció. Els colors de la superfície estan determinats per la degradació d'aquest material per a l'efecte del temps i dels agents naturals.
7. En  l'incompiuto siciliano, la tensió entre funció i forma es resol, en el sentit que la manca d'ús esdevé obra d'art.
8. L'incompiuto siciliano reensambla i reuneix llocs metafísics per a la contemplació del pensament i la imaginació.
9. L'incompiuto està basat en una ètica i una estètica pròpies.
10. L'incompiuto siciliano s'entén com a símbol del poder polític i de la sensibilitat artística.

(de la plataforma l'incompiuto siciliano i Alterazioni Video)
(veure també el documental Unfinished Italy)

17 de novembre del 2014

Detroit casa a casa

por David García para Yorokobu, 13 noviembre 2014
fotos de Michelle y Chris Gerard




"Cerró un banco. Buena noticia si eres enemigo del capitalismo y buena noticia para Lynne y Mike Savino, un matrimonio de Detroit que, años después del cierre, encontró en el local el lugar perfecto para moldear su vivienda. Dada la situación financiera en la que se halla la ciudad, algunas cosas solo pueden ocurrir en Detroit y en no muchos sitios más.

La progresiva decadencia que ha padecido la ciudad de Detroit en los últimos años ha dejado un importante catálogo de ruinas, estercoleros y rincones depresivos. El lugar que nos ocupa tenía todas las posibilidades ya que era, siendo benévolos, un buen puñado de porquería.





Su ahora propietaria, Lynne Savino, explica que el edificio llevaba ya varios años en venta. Los Savino, a la vez, vivían en una «casa grande y bonita» desde hacía trece años, pero aseguran que tenían planeado mudarse al centro de la ciudad más importante de Michigan para ocupar algún «espacio poco convencional».

10 de novembre del 2014

la metrópoli para quien la habita

Más de la mitad de la población mundial vive en ciudades. Sin embargo, apenas hay estudios sobre la influencia de un barrio en la calidad de vida de sus vecinos. Jan Gehl, arquitecto danés, es uno de los impulsores de un movimiento que busca aplicar el método científico al urbanismo y así diseñar ciudades más habitables. Además, dos proyectos españoles, en Madrid y Barcelona, estudian cómo repercute la organización urbana en la salud física y mental de los ciudadanos.


En algunas zonas de las grandes urbes, como Nueva a York, se tiende a una organización no apta para viandantes. Una generación de arquitectos, de la mano de las ciencias, quiere devolver las ciudades a las personas.

“Siento mucha pena por vosotros, los arquitectos, porque os comunicáis con vuestros dibujos en dos dimensiones y eso ha hecho que os obsesionéis con la forma”. Ante su auditorio, el ponente coge una jarra de cristal, la señala y dice: “Esto, por ejemplo, no es arquitectura, sino escultura. La arquitectura es la interacción entre la forma y la vida. Y solo si la interacción funciona, es buena arquitectura”.

Quien señala la jarra es Jan Gehl, arquitecto danés, durante su charla en el congreso científico ESOF celebrado en Copenhague en julio de 2014. Desde hace décadas Gehl se dedica a investigar y promover medidas para devolver las ciudades a la gente que las habita. Ciudades que albergan ya al 54% de la población mundial –y subiendo–, y que han sufrido un verdadero cambio de paradigma.

En 1971 Gehl publicó Life Between Buildings (La vida entre los edificios), un libro que se cita como uno de los referentes para la regeneración urbana. Justo diez años antes, apareció el que Gehl considera uno de sus favoritos: The Death and Life of Great American Cities (La vida y la muerte de las grandes ciudades americanas), escrito por Jane Jacobs, una periodista estadounidense que acababa de mudarse al Greenwich Village, en Nueva York.

Nueva York en lucha

El Village es uno de los barrios más antiguos de la ciudad y su organización rompe la típica cuadrícula neoyorkina. Las autoridades propusieron construir una autopista que lo atravesara, desplazando a numerosos residentes y destruyendo parte de los edificios históricos. El libro y las movilizaciones de Jacobs y de los vecinos, en contra de la propuesta y a favor de orientar las calles hacia sus gentes, lograron frenar su construcción. Poco después, el Village sirvió de nicho a la generación beat y ahora es uno de los pulmones sociales de la ciudad.

“Los arquitectos influyen en la vida de la gente, pero esta se pregunta por qué no piensan en ella”, comenta Gehl. “La llegada del coche y la bajada de precios de la gasolina han traído una confusión de escalas. Antes había una arquitectura de 5 km/h, adecuada para la gente que paseaba. Ahora se tiende a una arquitectura de 60 km/h, con grandes carreteras y espacios no aptos para quien camina”.

Gehl cita ejemplos de mala arquitectura producidos por una mezcla entre la confusión de escalas y la obsesión por la forma. Uno de ellos es el nuevo proyecto de Frank Gehry que ha enfurecido a los vecinos del barrio neoyorquino de Brooklyn, el peculiar complejo de apartamentos B1. O el llamado por Gehl “síndrome Brasilia”, culpable de la construcción de ciudades para que sean atractivas cuando se observan... desde un avión.


Brasilia es un ejemplo de ciudad diseñada para ser vista desde un avión.

“Cuando se sobrevuela Brasilia la vista es magnífica. La ciudad entera reproduce la forma de un pájaro, pero a pie de calle es una ruina”, comenta Gehl. Los espacios sin sentido hacen que la gente tenga que “caminar sin parar para no llegar a ninguna parte”. Algo parecido a lo que está sucediendo en muchas ciudades de China o en Dubai, con sus formas geométricas solo apreciables desde el aire.

Otro ejemplo de mala arquitectura para Gehl es el del museo Guggenheim, en Bilbao. Preguntado al respecto, comenta a Sinc que “es demasiado cerrado respecto a la ciudad. Es un edificio introvertido”. Todo lo contrario que el de la ópera de Sydney, que “tiene espacios públicos al aire libre muy útiles” o la Federation Square, en Melbourne, que, a pesar de parecerse mucho al museo de Bilbao, es “brillantemente extrovertido”.

Federation Square, en Melbourne, un complejo "brillantemente extrovertido".

Investigación y recogida de datos para un mejor diseño de las ciudades

En las listas de las ciudades más habitables figuran Copenhague, Melbourne y Sydney. En las tres los planes de rehabilitación han sido orientados por Gehl. Comparten dos preceptos básicos: facilitar que sus habitantes paseen por sus calles y que se desplacen en bicicleta. Las ventajas son numerosas: por un lado, las ciudades adquieren una escala más humana porque aumentan los comercios a pie de calle, los servicios y los puntos de encuentro; por otro, se consiguen ciudades más sostenibles.

Además, al reducir la contaminación y, sobre todo, al aumentar el ejercicio físico que practican los ciudadanos, mejora la salud global. Con el aumento de la esperanza de vida, una mejora de la salud en la tercera edad disminuye los gastos asumidos por el Estado. En general, “que estos planes contribuyen a mejorar la economía es algo que ha sido documentado numerosas veces”, según Gehl.

Estas medidas deben estar planeadas y sus efectos han de revisarse. Gehl es muy crítico con gran parte de los arquitectos modernos, que “hacen un edificio espectacular, sacan una fotografía que será portada de todas las revistas y corren a construir el siguiente. No revisan si su acción mejora la vida de la gente. Solo se someten a una discusión ideológica: van de un ‘ismo’ a otro ‘ismo’ porque se consideran artistas”.

31 d’octubre del 2014

la ciudad menguante, o cómo dar respuesta a la disminución de población

Marc Bassets y Guillermo Cervera, Youngstown. El País, 28 octubre 2014

El caso de Detroit es conocido y se ha comentado con anterioridad en esta web. Es la ciudad emblema de la pérdida de población a causa de la caída del sector productivo, sin embargo, no es un caso aislado. Los cambios en la economía global han causado y causan la pérdida de población que, a su vez, fuerza a las ciudades del viejo corazón industrial de Estados Unidos a tomar decisiones drásticas como destruir viviendas vacías. Eso es lo que sucede en Youngstown, Ohio, una ciudad de tan sólo 67.000 habitantes en un área habitada de unas 500.000 personas, según el censo de 2010, con universidad propia, y que creció como proveedora de mano de obra para el sector de la producción de acero hasta que, durante los años 1970s inició su declive.

El reportaje fotográfico publicado en El País no se recrea en la demolición de las casas. No a la manera de las fotos de guerra que muestran cadáveres en las portadas de los periódicos. Nos retrata el ambiente enrarecido de una ciudad en pleno declive. Las caras y los comentarios de sus ciudadanos hablan por sí mismos. Probablemente Detroit tiene masa crítica como para renacer transformada a partir de sus edificios reutilizados o de su tejido urbano parcialmente reconvertido en suelo productivo. Otras poblaciones más pequeñas quizá no tienen esa posibilidad.

En las últimas décadas Youngstown ha perdido más de la mitad de la población
En los años del esplendor Youngstown era una ciudad industrial vibrante
El declive empezó en Youngstown con el cierre de las plantas de acero
La actividad comercial es escasa en el 'downtown', el centro urbano
“Me alegro de que caiga”, dice esta mujer mientras observa el derribo de una casa vecina
"Meses para construirla y media hora para derribarla", dice un operario del Ayuntamiento de Youngatown mientras asiste a una demolición
Encargados de quemar los restos de la fábrica Wean United en el centro de Youngstown
Silver's Vogue Shop, ropa para caballeros en el centro de Youngstown
Mañana de otoño en el 'downtown'
Youngstown también desmantela fábricas


27 d’octubre del 2014

edificis disponibles per hores

un projecte cataloga 222 recintes a Barcelona que podrien utilitzar entitats
Dani Cordero, "Edificis aptes per a tots els públics"
El País, edició Barcelona, 25 octubre 2014


Aparcament Freser, a Barcelona

Els moviments socials i molts ciutadans barcelonins denuncien que els espais públics estan sotmesos a un imparable procés de privatització. Un projecte intenta capgirar aquesta situació i reclama poder col·lectivitzar per unes hores espais privats per donar servei a la societat. Donar cabuda a esplais o guanyar grans instal·lacions per fer-hi mercats dominicals o fins i tot àpats populars. “Tenim un potencial a la ciutat que ens permetria albergar activitats d'entitats sense ànim de lucre sense haver de construir res nou”, explica un portaveu del col·lectiu Infrausos, impulsat per quatre arquitectes i un filòleg.

El grup ha dut a terme un rigorós registre de grans espais —amb més de 300 metres quadrats de superfície, distàncies de quinze metres entre pilars i una altura mínima de 4,5 metres— i els han aparegut 222 espais que sumen una superfície total de 222.952 metres quadrats. Per fer-se'n una idea: dues vegades la terminal 1 de l'aeroport del Prat.


“Tenim molt espai disponible sense que ens n'haguem adonat”, explica el portaveu. La idea és “guanyar a la iniciativa privada espais per al domini públic, però sempre amb l'acord de les empreses”. Els llocs escollits tenen un ús transitori i concentrat en una determinada franja horària de la setmana. En molts casos es tracta de grans garatges que durant les hores punta dels dies laborables estan plens, però que a les nits i els caps de setmana acumulen molt espai disponible.

Amb aquesta disponibilitat horària, un esplai s'hi podria instal·lar un dissabte a la tarda per dur a terme activitats amb nens. Una associació de veïns, fer una reunió vespertina. I el cor de cambra ARSinNOVA, oferir un concert. La veritat és que la seva intenció és batejar el projecte amb una sèrie de quatre concerts en espais disponibles a Sant Martí amb capacitat per acollir quatre-centes persones. “Volíem treure la música dels llocs habituals, però també és veritat que amb la crisi el nostre sector està tocat i el lloguer l'haurem de pagar a tot arreu”, explica Pere Lluís Biosca, director del cor. En aquest cas, no hauran de pagar, tret que l'Ajuntament denegui la llicència a Infrausos, iniciativa seleccionada com a finalista per als premis 2014 de l'Institut Cerdà, que aquest any celebra el 30è aniversari.



La idea del projecte és que les empreses cedeixin de manera gratuïta els espais. I la resposta, de moment, no és del tot negativa. Dels 50 propietaris d'instal·lacions que s'han consultat, 11 han respost afirmativament i altres admeten que la idea és, almenys, interessant. El col·lectiu ha consultat els serveis tècnics dels districtes per confirmar si els espais catalogats serien aptes per dur-hi a terme activitats públiques.

“Si l'Ajuntament subvenciona la celebració d'activitats als terrats, per què no pot impulsar això?”, reflexiona en veu alta el portaveu d'Infrausos, que ha concebut un sistema per gestionar el projecte, del qual es convertiria en gestor i intermediari juntament amb l'Administració. Els usuaris potencials s'haurien de constituir en una cooperativa. Les empreses que cedeixin espais s'haurien d'inscriure en un cens en què concretarien en quines franges horàries poden alliberar l'espai. Per la seva banda, l'Ajuntament hauria d'assegurar bonificacions fiscals i exempcions de l'impost de béns immobles i del de societats per als empresaris.

21 d’octubre del 2014

entre la casa y la calle



Este jueves 23 de octubre a las 20:15h, se presenta en PLANTA BAJA, Logroño, la publicación

“ReHabitar en 9 episodios”

realizada por el grupo de investigación HABITAR del Departamento de Proyectos Arquitectónicos de la UPC. Con este motivo inauguraremos la exposición

La calle, espacio común activo

fruto de la doble mirada entre el grupo HABITAR y 2L arquitectos.
Contaremos con los arquitectos Roger Sauquet e Iñaki Tarragó, quienes nos explicarán los planteamientos de su trabajo. Como siempre, será un placer compartir con vosotros junto a un vino nuestras miradas más urbanas.


Las actividades están organizadas por PLANTA BAJA y el grupo HABITAR, con la colaboración del Colegio de Arquitectos de La Rioja y Fundación Cultural COAR.

PLANTA BAJA
calle La Cigüeña 10
26004 Logroño

"PLANTA BAJA es un espacio abierto de encuentro, exposición y venta ubicado en Logroño. El mundo imaginario recreado por 2L arquitectos en el misterioso local de la calle Cigüeña incita a la investigación visual. Arte, artesanía, diseño, mobiliario, moda… nuestra mirada tropieza con cientos de curiosos objetos selectos cuya colocación es aparentemente casual".


(http://www.plantabajamilan.com/) - en construcción

20 d’octubre del 2014

cultura para el desarrollo

Guga s’Thebe Theatre, el teatro comunitario de Langa

¿Puede un teatro convertirse en epicentro de la vida social de un township?
  Dos pistas: arquitectura sostenible y cultura para el desarrollo.
  El País, Vanessa Anaya (Wiriko), 17 octubre 2014

La construcción del nuevo teatro Guga s’Thebe de Langa, en Ciudad del Cabo, brinda la posibilidad a comunidades con menos recursos de acceder más fácilmente a actividades sociales, culturales y artísticas a las que habitualmente no tienen acceso. El arte y la cultura pueden ser importantes catalizadores para el desarrollo y la mejora de las condiciones de vida de una población que vive en una zona con graves problemas sociales y en riesgo de exclusión.

Langa, uno de los townships más antiguos de Ciudad del Cabo (Sudáfrica), fue construido durante la época colonial para desalojar a la población negra del céntrico y emblemático barrio District Six, bajo la Ley de Áreas Urbanas de 1923. Situado a pocos kilómetros del centro de Ciudad del Cabo, Langa no se caracteriza por formar parte de los suburbios con más altas tasas de criminalidad, pero las condiciones de vida de su población no son fáciles y no está exento de problemas sociales y económicos. Las protestas siguen siendo habituales por las graves dificultades sociales y urbanas que sufre un territorio alejado del privilegiado centro de la ciudad. El desalojo de Joe Slovo, uno de los asentamientos informales más grandes de la ciudad o el controvertido proyecto de construcción de viviendas N2 Gateway Housing Pilot Project son algunos ejemplos de los problemas sociales que existen.

La falta de espacios públicos, imprescindibles para fomentar una mejor convivencia entre los vecinos, ha sido también una importante carencia detectada por la comunidad y por las autoridades, que creen firmemente que la construcción de nuevos equipamientos culturales pueden ser una oportunidad de desarrollo y una mejora del territorio: “A menos que vivas en el centro de la ciudad o en ciertas zonas privilegiadas, no hay realmente equipamientos culturales diseñados. Hay una gran necesidad de proporcionar apoyo en el desarrollo de niños y jóvenes y muchas organizaciones culturales llevan a cabo programas de enseñanza de danza, música, teatro y artes visuales”, asegura el Consejero Garreth Bloor (Miembro del Comité de Turismo, Eventos y Desarrollo económico de Ciudad del Cabo) en la entrevista realizada por Wiriko.



Por ello, una de las peticiones más demandadas por sus habitantes ha sido la creación de un teatro para el uso de la comunidad, especialmente niños y jóvenes, complementando así el ya existente Centro Cultural Guga’s s’Thebe. La vida cultural de este township discurre principalmente en este centro construido durante el fin del apartheid en los años noventa. La intensa actividad del Guga s’Thebe durante estos últimos años y el número cada vez mayor de grupos de teatro y performance en Langa, han ido haciendo necesaria la ampliación del recinto cultural para dar cabida a otro tipo de actividades de mayor envergadura.

Además Langa —que significa sol en lengua xhosa— ha sido el hogar de muchos líderes políticos y comunitarios, músicos, artistas, etc., lo que ha despertado un gran interés turístico y cultural. Como asegura Bloor: “Langa se está convirtiendo en un lugar muy popular entre los turistas por su historia, lo cual está desarrollando una fuerte economía del turismo”.

Después de la decadencia que sufrió a principios de la década de los 2000, Guga s’Thebe —y en consecuencia el nuevo teatro anexo—, está encaminado a situarse como un punto de referencia en la región tanto para jóvenes y artistas como para aquellos visitantes que prefieran conocer la escena cultural fuera de los circuitos más frecuentados por el turismo masivo.

La arquitectura como práctica social y cultural

La construcción de Guga s’Thebe Theatre es un proyecto que se apoya en los principios de una arquitectura sostenible, asegurando así que tanto el diseño como la construcción se adapte perfectamente a la realidad social, espacial y cultural. Así, la historia de Ciudad del Cabo está plasmada de una forma u otra el diseño y los materiales utilizados, con una lógica de reutilización, reciclaje, métodos de construcción de bajo coste e inteligencia energética. No es de extrañar que el proyecto forme parte del Cape Town World Design Capital 2014.

Más información del proyecto aquí

El equipo formado para llevar a cabo el proyecto se creó a partir de la colaboración realizada a través de la revista de diseño de interiorismo AIT, que puso en contacto al grupo Design·Develop·Build (formado por las universidades Peter Behrens School of Architecture de Düsseldorf, RWTH Aachen de Aachen y el Georgia Institute of Technology de Atlanta) con la arquitecta sudafricana Carin Smuts de CS Studio de Ciudad del Cabo, involucrada en la construcción del centro cultural desde sus inicios en 1992. Fue entonces cuando pensaron que un proyecto de colaboración sería la mejor manera de construir el nuevo teatro, concebido como un programa de apoyo a la siguiente generación de artistas.

“Tras numerosas reuniones con la comunidad y el Ayuntamiento de Ciudad del Cabo, se hizo evidente la necesidad de dar cabida a nuevas actividades, que el centro Guga S'Thebe no podía ofrecer: un espacio para eventos grandes, ya que [el centro] fue concebido como un espacio de ensayo y utilización para grupos locales de teatro infantil. Tenía como objetivo proporcionar una oportunidad para el continuo empoderamiento de la juventud así como el aprendizaje, la música y el ocio, incorporando una estética lúdica. La idea de construir un espacio para 200 personas fue desarrollada con la comunidad y con el Ayuntamiento, para permitir realizar actividades a compañías de teatro locales, conciertos, misas, bodas y festivales”, afirma Daniel Baerlecken, uno de los arquitectos delGeorgia Institute of Technology de Atlanta, en una entrevista para Wiriko.

Una de las características más atractivas de la construcción del Guga s’Thebe Theatre, es la vertiente colaborativa en la que alumnos sudafricanos e internacionales se han puesto manos a la obra —y con sus propias manos— en la construcción del teatro desde cero, aplicando esta teoría a la práctica e integrando la cultura a la arquitectura: “Los proyectos Diseño-Construcción se basan no sólo en el intercambio de conocimientos, sino también en la experiencia cultural tanto para el creador como para el usuario. (…) incluye la comprensión de la arquitectura como práctica social y la toma de conciencia de todas las consecuencias y las responsabilidades éticas” afirma Baerlecken.

También han participado en el proceso trabajadores locales, que han sido formados en técnicas de auto-construcción alternativas, de bajo coste y baja tecnología, lo que les permite aplicarlas en el futuro en la construcción de nuevas infraestructuras, asegurando así que el proyecto pueda ser durable en el tiempo.


Más información del proyecto aquí

“Apostando por un uso honesto frente a la alta ingeniería” en propias palabras del arquitecto, la construcción del teatro está hecha a partir de la reutilización de contenedores de acero provenientes del puerto marítimo —he aquí una parte de la historia de Ciudad del Cabo—, utilizados con frecuencia en los townships por su seguridad y su precio. Una vez apilados, los contenedores están dispuestos alrededor de un habitáculo central y albergan espacios como bastidores, un comedor popular, palcos, un estudio de grabación, etc. El problema de climatización que caracteriza a estos contenedores se ha solucionado con un revestimiento de arcilla y paja cubierto con diferentes materiales: “Esta capa, que proporciona protección contra la intemperie y al mismo tiempo genera la identidad del edificio, se crea a partir de materiales locales reciclados como madera de cajas de fruta, neumáticos viejos y plástico, pero también se adapta a un textil vernáculo en el diseño de la fachada —inspirado en un patrón local Xhosa—. La combinación de materiales reutilizados o reciclados con métodos de construcción locales y tradicionales puede ser un elemento clave de métodos neo-vernaculares de construcción de bajo coste”, sostiene Baerlecken.

El recién inaugurado teatro ha albergado numerosos eventos durante su construcción. Con un exterior ya casi terminado y un interior en curso, la finalización completa del teatro será a mediados de 2015, cuando el Ayuntamiento tiene previsto equipar el edificio con mobiliario, cafetería, tienda, un espacio de galería y una mejor iluminación y sonido.

Sin duda, se puede considerar el Guga s’Thebe Theatre como una obra paradigmática de las posibilidades del diseño y de la arquitectura contemporánea a la hora de dar respuesta a unas condiciones sociales y espaciales muy determinadas. La unión entre la experiencia práctica con la investigación cultural, muestra una mejor adaptación al entorno y a las necesidades reales de la comunidad, haciendo que la arquitectura moderna sea, reiterando las palabras de Baerlecken, una auténtica práctica social.